viernes, 1 de agosto de 2008

Tiempo de viaje

Después de un viaje de 24 horas arriba de un micro, me he dado cuenta que en los viajes, no importa el lugar a donde sea, o el tiempo que demore llegar, se me da por empezar a pensar cosas profundas. Vaya uno a saber si será el café con gusto amargo, el jugo con gusto a orina o el interminable problema de bambolearse y chocar con todo mientras uno esta en el baño de la unidad.
He descubierto que el paisaje es un motor importante para empezar a dibujar ideas (hoy nos pusimos en eruditos y literatos) y que la música, fiel compañera en cualquier momento (algo así el café de la publicidad que decía "Donde estés estaré, donde estés estaré") hace que las ideas sigan brotando, que como un volcán en erupción, se conviertan esas ideas vagas y precarias en razonamientos un poco más elaborados.
El paisaje y el conocimiento del mismo afectan los temas sobre los que uno razona. Si lo que ves por la ventana es el mismo campo o el cartel que te da la bienvenida a Chasmcomus, se me da por pensar en cosas cotidianas ("Porqué no le dije X cosa; porqué dije X cosa; cuando llegue le digo todo, no me voy a callar más nada!"). Pero si por la ventana vez un paisaje medio árido, un camino que costea un lago y comenzás a ver picos nevados...ahí empecé a pensar en la esencia de las cosas, en las bases por las cuales las mismas se sustentan y están presentes en mi vida ("Como fue que empecé a notarla?; su personalidad sigue igual que cuando la conocí?; que hice mal para que hoy esa persona no esté como estaba antes?)
A que me llevaron estos razonamientos?. A darme cuenta que mientras uno más "cotidianiza" las cosas, más las vuelve rutinarias y mecánicas, las mismas se alejan de sus bases. Y cuando las cosas se alejan de sus bases, de sus puntos de partidas, de las cosas tan básicas por las que empezaron a lograr que nos interesemos en ella...simplemente, esas cosas dejan de ser ellas.

2 comentarios:

Tam dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Hola Rober. Pretendo hacer un comentario que espero sea tomado como crítica constructiva y no como una agresión o acto de elevado egocentrismo del tipo "hola, soy mejor que vos".
Es interesante lo que escribís, podría decirse que la idea "está buena", pero se pierde a mitad de camino. Yo lectora me pierdo en el texto por la cantidad de palabras (ojo!, está buenísima la demostración de amplio léxico, y que lo tengas mucho más)mal usadas, o frases y/o ideas "mal" expresadas...confusas.
A veces, las cosas más simples son las mejores. Durante la lectura da la sensación de que buscás complicar las cosas por una extraña X razón y, de verdad, no hace falta que lo hagas. Te lo digo como consejo (tómalo o déjalo)


Y ahora la corrección ortiva:
"Porqué no le dije X cosa; porqué dije X cosa"

Debería ser:

Por qué no le dije X cosa; por qué dije X cosa...

Y en lo que sigue (o en lo anterior) hay algo, evidentemente, mal redactado.
O por ahí fue a propósito y, en ese caso, mis disculpas.

Saludos!